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- Laura
- Soy una perra mestiza. No creo en las razas, si en las especies. Y en las especias...porque yo soy especial.
domingo, 25 de abril de 2010
¿Sabes?
- ¿Sabes? Tengo guardados en una cajita un puñado de pelitos tuyos que se quedaron por la cama aquella noche en la que no paramos de hacer el amor.
- ¿Cómo?
- Lo que oyes, si, si, no me mires así como si fuera algo extraño. Bueno, si quizá lo sea pero no tiene nada que ver con el fetichismo ni nada que se le parezca. Te fuiste tan temprano, al amanecer, una ducha y a correr a la estación… en fin, me hubiera gustado que me dejases algún recuerdo, no sé, alguna flor que poder conservar entre las páginas de un libro. Un libro. Una carta. Solo una toalla impregnada de tu olor y esos pelillos dispersos entre las sábanas. Fueron unas horas tan intensas. Nos dijimos tanto. Nos amamos tanto. Vivimos tanto, que nos faltó el tiempo de una vida para vivirla juntos.
Ya ves, a veces, el amor se reduce a un puñado de pelitos esparcidos por unas sábanas arrugadas. Porque los trenes no esperan para nadie.
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19 comentarios:
Laura hoy me has sorprendido y mucho...Jajajajaj.
Muxus
Llevaba tiempo sin subir una entradita...me alegro Montxu que haya servido para sorprenderte, al menos jajaj...
Eso me temo, que no esperan... me encanta la foto del tren que no ha esperado.
Camaleona, la fotógrafa es mi hija Macarena...antes creía que yo hacía buenas fotos, hasta que la niña se compró su cámara nueva....
Jajaja, sin duda extraño pero interesante ;)
Ay Emejotilla, si que lo es... jjajajja
Hasta el más minúsculo de los objetos, se convierte en el más preciado, sólo porque lo haya tocado alguna vez la persona que amas o has amado.
Ya pasado, los cuarenta, me doy cuenta de que tengo mi casa llena de tesoros. Sin valor para nadie. Con todo el valor del mundo para mí.
Alfonso, como la canción de Serrat...
"son aquellas pequeñas cosas..."
ya hacia tiempo que no te leía, me alegro de que hayas retomado tu blog, un beso
Verdad decís, mi Señora,... a nadie esperan los tresnes,... pero recuerde Vuestra Merced que pasan cada hora,... cada dia,... cada semana,... y siempre a distintos lugares,... el amor, mi Señora, no se reduce a esos vellos entre las sábanas,... sino a su significado.
Gestos de ducha y a correr variados.
Capitanlio, es que con el barrigón de seis meses que tengo ya me choco con la mesa del ordenador jjajaj... por eso apenas escribo jjajaj
Por supuesto mi Capitán, perdón, Don Rodrigo, eso es lo bueno de los trenes, que pasan muchos...jajajaj...
luego pasará el tiempo y diras ¿y estos pelos? y te acordaras... un besito guapa.
Eva, a lo mejor es lo que ya ha pasado jjajajj
Laura, es normal que hubiera pelillos en la cama, ten en cuenta que los perritos como tú tenéis épocas de muda. De todas formas, cuando quieras tener un recuerdo de algún amante perruno,dile a tu mamá humana que le haga una foto... y que no te pegue los "pelaos" que te pega, que a Coco le gustas más con el pelo largo.
Bss.
¡Y lo fresquita que estoy Moncho! jajjajjj
P.D.- Veo que lo de los pelillos como que ha causado estragos en esta entrada jajjajj
De todas formas lo importante es tener un paraguas. Jubilata dixit.
Jajjaja...¡Jubilataaa, qué alegría! Bueno, estos días, con la que está cayendo, mejor convertimos el paraguas en sombrilla ¿no?
Laura te invito a que conozcas mi blog, no tiene nada que ver con el tuyo, pues no tengo ni idea pero se hace lo que se puede , un beso y espero valla todo bien
http://capitanlio.blogspot.com/
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